¡Hola! 👋
En esta ocasión comparto contigo un breve repaso sobre sialoadenosis responsiva a fenobarbital junto a un caso clínico 🤓
Introducción
La patología de las glándulas salivales es infrecuente tanto en perros como en gatos.
Las enfermedades más comunes que afectan a las glándulas salivales incluyen:
Neoplasia.
Edema.
Sialoadenitis.
Sialocele.
Infarto.
Sialolitiasis.
Sialoadenosis.
¿En qué consiste la sialoadenosis?
La sialoadenosis es un agrandamiento bilateral, indoloro, no inflamatorio, uniforme y no neoplásico de las glándulas salivales.
En humanos, esta es una enfermedad desencadenada por una alteración secretora y metabólica del parénquima acinar y caracterizada por una hipertrofia uniforme del parénquima acinar funcional.
La afección se ha clasificado en 3 grupos principales:
Neurogénica.
Distrófica.
Metabólica / hormonal.
La disfunción de la inervación del sistema nervioso autónomo de las glándulas salivales puede ser un factor unificador en todas las formas, tanto en perros como en humanos.
La sialoadenosis se puede observar en personas con bulimia, anorexia nerviosa, desnutrición, enfermedades hepáticas, diabetes mellitus y neoplasias.
En medicina veterinaria, la literatura existente está limitada a pocos casos donde se describe sialoadenosis idiopática en perros.
La sialoadenosis responsiva al fenobarbital (SRF), también conocida como sialoadenosis idiopática, es una enfermedad idiopática rara en perros que se caracteriza por una aparición repentina de arcadas y deglución con agrandamiento bilateral de las glándulas salivales.
En perros con SRF generalmente se observan:
Náuseas.
Ptialismo.
Pérdida de peso.
Hiporexia / anorexia
Vómitos.
¿Qué produce el desarrollo de sialoadenosis?
La etiología de esta afección sigue sin ser comprendida, aunque se ha asociado con una forma inusual de epilepsia límbica.
El diagnóstico de SRF implica la exclusión cuidadosa de otras enfermedades con signos clínicos similares, incluidas las enfermedades gastrointestinales primarias y secundarias, ya que no existe una prueba específica disponible para el diagnóstico definitivo.
El diagnóstico de SRF se confirma clínicamente (por exclusión) mediante una mejoría rápida de los signos clínicos tras la instauración del tratamiento con fenobarbital.
¡Vamos a por el caso clínico de Pandorino! 😊
Pandorino es un Staffy de 2 años con una historia crónica (2 meses) de sialorrea marcada, pérdida de peso y arcadas / vómitos intermitentes. A continuación puedes visualizar varios vídeos tomados por los tutores:
Observamos como Pandorino retrae los belfos de forma constante, presenta degluciones repetidas y episodios de “estornudo inverso”:
Otro ejemplo donde observamos cambios similares:
Durante el paseo:
En consulta:
Te muestro el abundante contenido de saliva / agua que expulsaba Pandorino durante la consulta tras los episodios que has observado:
El examen físico revela un aumento leve / moderado de las glándulas salivales submandibulares a la palpación.
Las analíticas sanguíneas (hemograma / bioquímica) y el urianálisis no revelan cambios reseñables.
Las radiografías cervicales / torácicas no muestran alteraciones macroscópicas relevantes.
Se lleva a cabo un examen de las vías aéreas y cavidad oral bajo anestesia donde no se observan alteraciones.
Evaluamos la nasofaringe mediante nasofaringoscopia, observando leve eritema de las coanas sin presencia de material / cuerpo extraño.
Se lleva a cabo imagen avanzada del cráneo / cuello (TAC) sin detectar alteraciones que justificaran el cuadro de Pandorino:
Realizamos esofagogastroscopia, descartando la presencia de esofagitis y/o material extraño.
Se realiza aspirado con aguja fina de las glándulas salivales, sin detectar cambios microscópicos reseñables.
¿Qué consideramos en este punto?
Ante la ausencia de cambios anatómicos / estructurales que justifiquen el cuadro de Pandorino tanto a nivel nasofaríngeo como esofágico y gástrico, se emite un diagnóstico presuntivo de sialoadenosis.
Iniciamos terapia anticonvulsivante con fenobarbital (2 mg/kg q 12 horas).
Pasados 2 semanas…Pandorino se muestra así de bien 🥳
Para finalizar, algunos datos más…
En medicina humana, los hallazgos en los estudios citológicos e histopatológicos de las glándulas submandibulares suelen ser normales, aunque la microscopía electrónica ha mostrado cambios degenerativos en las neuronas posganglionares y las células epiteliales asociadas pueden sufrir necrosis.
No está claro si los perros con agrandamiento y necrosis de las glándulas salivales tienen una afección diferente a la de los perros con los mismos signos clínicos pero sin patología de las glándulas salivales.
La aspiración con aguja fina puede pasar por alto áreas focales de necrosis, pero algunos perros afectados no tuvieron evidencia de necrosis de las glándulas salivales incluso en necropsia.
Es posible que la necrosis observada fuera el resultado del proceso de la enfermedad subyacente (como una disfunción autonómica, como se ha descrito en humanos), en lugar de ser una causa directa de los signos clínicos.
Esta teoría fue respaldada por el hecho de que la extirpación de las glándulas salivales afectadas, en varios perros, no resultó en la resolución de los signos clínicos.
Teniendo en cuenta que la SRF se considera un tipo de epilepsia, idealmente se deben realizar diferentes pruebas para descartar enfermedades que afecten al sistema nervioso central.
No existe una prueba específica disponible para diagnosticar la SRF, por esta razón el diagnóstico definitivo se logra mediante criterios de exclusión y tras observar una respuesta favorable a la terapia anticonvulsivante.
El tratamiento con fenobarbital generalmente resulta en una mejoría significativa dentro de las primeras 72 horas y disminución del tamaño de las glándulas salivales en 2-4 semanas.
En comparación con la epilepsia idiopática, la SRF requiere dosis bajas y duraciones de tratamiento más cortas.
Conclusión 📝
Se debe considerar la SRF al establecer un diagnóstico diferencial de vómitos o regurgitaciones crónicas con glándulas salivales agrandadas en perros.
¿Conocías esta patología? 🤓
¡Gracias por formar parte de VETPIL! 😊
- Carlos Martínez Gil
Un caso muy interesante.